En el día de ayer, la marcha llegó hasta Zamora, capital de Zamora-Chinchipe, con normalidad desde El Pangui. A la llegada, los participantes coparon la catedral de Zamora. Monseñor Walter Heras, expreso, su solidaridad con la Marcha por el Agua, la Vida y la Dignidad de los Pueblos, "el agua es la vida, y debemos cuidarla, si a ella no se la respeta y no se reparte equitativamente no habrá el Sumak Kawsay (el concepto de vida en plenitud de los pueblos indígenas del Ecuador), por eso estamos en el deber y la obligación de defenderla, todos los seres vivos que habitamos en la tierra, necesitamos de ella", además pidió al todo poderoso que les cuide en su recorrido.
La Marcha contó en el día de ayer con marchas de apoyo en distintas provincias de Ecuador: Azuay, Chimborazo, Imbabura, Morona-Santiago, Pichincha, Santo Domingo de los Tsáchilas, Sucumbíos... En Cuenca, capital de Azuay, otra de las provincias que se vería afectada por la minería, la manifestación por el agua recorrió la ciudad en un ambiente festivo. Las organizaciones "Mujeres Defensoras de la Pachamama" y "Guardianas de la Amazonía" protagonizaron una jornada informativa y cultural. Con fotografías y carteles expusieron la cruda realidad de pobladores de zonas mineras de otro países de Centroamérica, Norteamérica o Perú. Cuenca se vería directamente afectada por el proyecto minero en las lagunas de Kimsacocha, que proveen el agua a la ciudad.
En la capital, Quito, la marcha contó con el apoyo de siete mil manifestantes convocados por diversos movimientos sociales, sindicatos y organizaciones políticas progresistas que se movilizaron de forma pacífica durante cuatro horas en el centro de la capital.
Hoy viernes, la marcha llegará a la ciudad de Loja, donde está previsto un recibimiento y distintos actos por el Agua, la Vida y la Pachamama.
